07 agosto 2006

elgatofelino aparentaba así


elgatofelino a veces aparentaba asi:

04 agosto 2006

Las aventuras y desventuras de elgatofelino en la noche madrileña

He de reconocer que como elgatofelino, cuando aun no sabía que me llamaba así, he sufrido, padecido y disfrutado de situaciones inverosímiles en la noche, generalmente madrileña. Me he decidido a contarlas por disciplinarme a usar un blog, (aun a sabiendas que los gatos huimos de la disciplina como del agua), por engrasar la mente y ejercitar el uso de la palabra, que tan buenos resultados me dio por los caladeros de focas de la ciudad. Supongo que además me permitirá revivir las situaciones como ahora son, es decir como las recuerdo, lo que no les quitará ni ápice de inverosimilitud, puesto que ni mis más íntimos colegas llegaron a creérselas en su momento.

Lástima que esto no lo lea nadie, en especial mis colegas de cacería quienes, las compartieron, las padecieron y las envidiaron. También me gustaría que las leyesen mis adorables conquistas, o callos según la inquina de mis amigos, sobre todo porque refutarían su veracidad. O no, pero darían fe de que lo que voy a contar aconteció. Y por supuesto espero que en algún momento tenga el valor de mostrárselo a mis cachorros gatunos para poder diatribar sobre el noble arte plebeyo de la cacería nocturna, de cómo ir a esquilmar los caladeros de los ricos, sin ser guapo ni tener fortuna, de como inevitablemente la curiosidad gatuna nos mete en líos, y como se puede salir de los mismos con las siete vidas y la gata. Lo cual alguna vez sucedió.

Por ahora es suficiente aunque prometo a mi no audiencia comenzar a inmortalizar las aventuras de elgatofelino cuando el trabajo y la vida me lo permitan. Mientras tanto sirvan este chorro de bits para desperdicio de los discos del blogs, y como muestra de mí decidido empeño a sacar a la luz los aspectos más lúdicos, sexys, engorrosos, y por supuesto pecaminosos de mis andanzas.